martes, 30 de mayo de 2017

Ser madre!!

De: Ana María Dipp Mukled


Cuando aún mi imaginación

dibujaba vuestros rostros incansablemente.



Cuando aún mis momentos

dibujaban vuestros dulces rasgos.



Cuando aún los sentía

palpitar muy dentro mío.



…Y aún ahora,

que puedo palpar vuestros rostros.



Ahora que puedo recorrer con la mirada,

cada uno de vuestros rasgos.



Ahora puedo abrazar y sentir,

vuestros tiernos cuerpecitos.



Sé cuán sublime es

ser madre!!

Alegrías del amor

Alegría me da cuando te tengo,

Alegría me da cuando te veo,

Alegría me da cuando me besas,

Alegría me da cuando me tomas,

Alegría me da cuando te sueño,

Pero llega el momento en que todo esto se convierte en miedos, pero cuando pasa eso solo pienso en ti y en lo feliz que me siento cuando estoy contigo.

Salí de la obscuridad y vine a la luz, por que yo escogí que así fuera, dejé el llanto y la tristeza de mi alma, y ahora confió en el hombre que me pueda hacer feliz. Los dos idealizamos nuestro amor a nuestro antojo y la luz nos alumbra.

Si me preguntan que si soy feliz, responderé que si, ahora soy feliz, muy feliz, por que los dos vivimos por este amor tan bonito, tu mano enlazada a la mía, el cielo que nos es por techo y nuestro amor es nuestro propio refugio, aunque afuera este lloviendo.

Los dos nos cobijamos con nuestro amor que es tan profundo, mi nombre esta grabado muy adentro de tu pecho, donde nadie le haga daño, ni contamine este hermoso sentimiento.

Como agua limpia y clara nuestro amor brota del alma, bebo de tus fuentes puras y cristalinas, eres ternura deseo y pasión, que recorre por mis venas, fuego encendido que enardece mis sentidos.

Te amo vida mía, te amo, contigo he aprendido y he conocido intensos sentimientos, me has enseñado amar con entrega total soy tuya y tu eres mío y no te dejaré ir, por que espero que yo sea la mujer que te haga feliz.

Por que realmente TE AMO.

martes, 23 de mayo de 2017

La sal y el algodón en el río

Llevaba Nasruddin una carga de sal

al mercado. En el camino, su asno tuvo que vadear un río y la sal se disolvió.

Al alcanzar la otra orilla, el animal

se puso a corretear, contentísimo de haber visto aligerada su carga.

Al contrario, Nasruddin estaba enojado de veras.

Al siguiente día en que había mercado,

Nasruddin llenó los sacos con abundante algodón. Al cruzar el río,

el asno pensando que la carga se aliviaría

entró en el agua con toda confianza,

pero a poco casi se ahoga por culpa del

exceso de peso.

“¡Tranquilízate!” dijo alborozado

Nasruddin. “Esto te enseñará que no siempre que cruces el río vas a ganar tú!”.

De El canto del pájaro - Athony de Mello

lunes, 22 de mayo de 2017

Tatuaje

En el principio de los días

y al final de mis noches;

tus ojos, tus manos y tus brazos

me dan sus cálidas miradas,

sus caricias y sus abrazos.



Cómo olvidar

el brillo del sol,

el verde campo.

La luna y las estrellas;

el infinito contigo…

No quiero olvidarte,

porque estás tatuada en mis ojos,

en mis manos, en mis brazos,

en mi cuerpo y en mi mente…



No puedo olvidar la felicidad,

porque estás tatuada

en mi piel, en mi alma,

y en todo lo que fue

mi soledad,



en todo lo que es mi dolor,

en todo lo que será,

el recuerdo silencioso de tu amor…



Por siempre, y para siempre:

Estás tatuada en mí…

martes, 16 de mayo de 2017

Canto Lejano

De: Práxides Hidalgo Martínez

Canto cautivo,

te liberas de nuestros remotos recuerdos

para llenar los vacíos días;

serenata que acompaña el pálpito de lo vivido,

vértigo que embriaga con aroma de palabras

que como ecos llenan estos versos.



Retoñar de pasajes congelados que se escapan

por rendijas de revelación de páginas bellas

escritas en el diario de nuestras vidas

y hoy sacian nuestras ansiedades.



Canto liberado de un pasado;

presente en el umbral de la tristeza

convierte en alegría este último tramo

para llegar a la estación final.

sábado, 6 de mayo de 2017

Hojas Amarillentas

De: Ana María Dipp Mukled

Tupidos senderos de hojas amarillentas,

derraman su melancolía

sobre las veredas

del gris otoñal.



Tupidos senderos de hojas amarillentas,

cubren silenciosos,

parajes lejanos

de un dolor antiguo.

Tupidos senderos de hojas amarillentas,

realzan la ausencia,

en la letanía de unos pasos

que trasuntan rumbos vagos y añejos.

martes, 2 de mayo de 2017

Invocación al libro

De: Félix Sangüeza Oros

El 23 de abril instituyó la humanidad

Día de tu existencia desde la antigüedad,

noble amigo, enseñas siempre al ser

educación y saber para el recto andar.



Tu amistad es como el inmenso océano

cuyas brisas refrescan el sentimiento,

tus páginas infunden energía y amor

dan espiritualidad y alegría con fulgor.



Ingeniosos escritores loaron de edad remota

la elocuencia y reflexiva orientación recibida,

el bien y esperanza del mundo está en ti cifrada

y la sanidad ambiental de convivencia pacífica.

Eres el instrumento vital del glorioso triunfo

ante intentos de invasión al pensamiento,

das luz a la ignorancia y oscurantismo ominoso

eres el blasón y símbolo del vivir armonioso.



LIBRO, eres amigo y compañero en la vida

sabio, leal consejero, Don Quijote que cabalga,

quédate eternamente en la Santa Madre Tierra

pues tu presencia significa sabiduría y cultura.

Lluvia sagrada

González Carbalho
Tiendo a la lluvia fría la mendicante mano

Y amanece mi espíritu sintiendo su frescura;

Se hacen nido mis manos en la alegría pura

De aprisionar en ellas un corazón hermano.

Y el inseguro cuenco pleno de agua llovida

Subo a mi boca y bebo la pureza del cielo.

–¡Agua de Dios!–exclamo, renacido al consuelo

de haber con agua virgen bautizado mi vida.

Y el alma profetiza que esta es lluvia sagrada,

Amor para el que tiende su mano de mendigo;

Palabra hecha de llanto que Dios dice a su amigo

El hombre que ha sufrido y ya no espera nada.

Dios bendice mis manos con lluvia de cariño,

Y aunque me amargan duras tristezas de la vida,

Anidando el espíritu de la lluvia caída

Siento las manos nuevas como el alma de un niño.

Mañana, si un amigo me estrechara la mano,

Se ha de sentir contento sin saber el motivo,

Y así con mi recuerdo marchará pensativo

Y tendré, por las calles del mundo, un nuevo hermano.

Y hoy, huérfano de fuerzas, cuando vaya a mi lecho,

Me habré de persignar sin haberlo pensado,

Y soñaré esta noche lo que nunca he soñado

Porque estarán cruzadas mis manos sobre el pecho.